...nos encontramos con numerosos caminos, pruebas, obstáculos que
tenemos que elegir, superar, eliminar y en ese viaje nos acompañan las
personas, los amigos, las ilusiones y los sentimientos más puros pero
también los miedos, las decepciones, las caídas...
Vivimos en un mundo muy veloz, con un egocentrismo brutal, un mundo en el que no sabemos disfrutar de la vida, no sabemos ver los caminos de los demás, no comprendemos cual es la verdadera esencia de la vida. No sabemos comprometernos con el de al lado.
En mi mano izquierda llevo, con el máximo orgullo, los dos compromisos más importantes de mi vida: el recuerdo imborrable de mi mejor amigo, que siempre estuvo ahí y que nunca me falló, al que he querido, quiero y jamás dejaré de querer y por supuesto el más importante de todos: el símbolo de nuestro compromiso, de nuestro amor, de nuestro futuro, de nuestras ilusiones y de nuestros miedos. El símbolo de nuestra felicidad. Porque sabes que sin ti mi fuerza se reduce a la
Vivimos en un mundo muy veloz, con un egocentrismo brutal, un mundo en el que no sabemos disfrutar de la vida, no sabemos ver los caminos de los demás, no comprendemos cual es la verdadera esencia de la vida. No sabemos comprometernos con el de al lado.
En mi mano izquierda llevo, con el máximo orgullo, los dos compromisos más importantes de mi vida: el recuerdo imborrable de mi mejor amigo, que siempre estuvo ahí y que nunca me falló, al que he querido, quiero y jamás dejaré de querer y por supuesto el más importante de todos: el símbolo de nuestro compromiso, de nuestro amor, de nuestro futuro, de nuestras ilusiones y de nuestros miedos. El símbolo de nuestra felicidad. Porque sabes que sin ti mi fuerza se reduce a la
mitad, mis ilusiones se destrozarían en pedazos al igual que mi corazón, porque eres esa mitad que me completa, el único capaz de sacarme unasonrisa sincera si estoy triste, eres la razón por la que late este
corazón, la luz que ilumina mi camino, la mano que me ayuda a
levantarme si me caigo, la fuerza que necesito cuando algo es demasiado
grande para mí y siempre lo serás, porque a tu lado el camino es más bonito,
las pruebas se llevan mejor y los obstáculos se mueren de miedo al
vernos llegar.
Gracias por lo que haces cada día pero sobre todo, gracias por existir.